Adalberto Cuello, padrastro y principal sospechoso del crimen
de Tomás Dameno Santillán, llegó esta mañana al la Fiscalía de Junín
para ser indagado en el marco de la acusación por “homicidio agravado
con ensañamiento y alevosía”.
El fiscal de Junín Javier Ochoaizpuro, a cargo de la investigación avanza con una serie de pericias y declaraciones para tratar de determinar si Cuello, de 36 años, actuó para “vengarse” de su ex mujer, madre de la víctima.
Según dijo el fiscal en declaraciones radiales y televisivas, “hay elementos para suponer que esta persona sería la responsable”.
Para la Justicia, la cuenta de Facebook de “Adalberto R Cuello” –tal como figura en la red social– no es un detalle trivial de la investigación: el día de la desaparición de Tomás, Cuello subió dos fotos, a las 12.53 y a las 13.10. Según los primeros indicios que dio la autopsia, Tomás murió entre las 12 y las 16 del martes, “inmediatamente después de desaparecer”, según precisó después el fiscal Ochaizpuro.
El cadáver de Tomás fue encontrado por una vecina de Lincoln en un predio que pertenecería a un allegado de Cuello, a 500 metros de la ruta provincial 50, y a tres kilómetros de la rotonda de acceso al pueblo.
Los investigadores tratan ahora de analizar si los cincuenta minutos que pasaron entre la salida de Tomás del colegio Domingo Faustino Sarmiento, el martes a las 12, y el horario en que fue subida la foto fueron suficientes para capturar al chico, asesinarlo y deshacerse de su cuerpo, a unos tres kilómetros de donde desapareció el menor. Es decir, si lo que ocurrió en el muro de su Facebook se trató de un plan para simular una ocupación y dejar un rastro preciso de sus actos.
Los indicios hablan de un crimen con cierta planificación, hecho que fue confirmado ayer por el ministro de Justicia de la provincia de Buenos Aires, Ricardo Casal: “El crimen de Tomás fue premeditado, no hay dudas. El que lo hizo, lo hizo así. Alguien lo subió a algún vehículo y terminó en ese montecito de las afueras de Lincoln asesinado de un modo inmediato. Se está trabajando para ver si alguien pudo haber visto algo”, dijo el funcionario.
Fuente Clarin.com
El fiscal de Junín Javier Ochoaizpuro, a cargo de la investigación avanza con una serie de pericias y declaraciones para tratar de determinar si Cuello, de 36 años, actuó para “vengarse” de su ex mujer, madre de la víctima.
Según dijo el fiscal en declaraciones radiales y televisivas, “hay elementos para suponer que esta persona sería la responsable”.
Para la Justicia, la cuenta de Facebook de “Adalberto R Cuello” –tal como figura en la red social– no es un detalle trivial de la investigación: el día de la desaparición de Tomás, Cuello subió dos fotos, a las 12.53 y a las 13.10. Según los primeros indicios que dio la autopsia, Tomás murió entre las 12 y las 16 del martes, “inmediatamente después de desaparecer”, según precisó después el fiscal Ochaizpuro.
El cadáver de Tomás fue encontrado por una vecina de Lincoln en un predio que pertenecería a un allegado de Cuello, a 500 metros de la ruta provincial 50, y a tres kilómetros de la rotonda de acceso al pueblo.
Los investigadores tratan ahora de analizar si los cincuenta minutos que pasaron entre la salida de Tomás del colegio Domingo Faustino Sarmiento, el martes a las 12, y el horario en que fue subida la foto fueron suficientes para capturar al chico, asesinarlo y deshacerse de su cuerpo, a unos tres kilómetros de donde desapareció el menor. Es decir, si lo que ocurrió en el muro de su Facebook se trató de un plan para simular una ocupación y dejar un rastro preciso de sus actos.
Los indicios hablan de un crimen con cierta planificación, hecho que fue confirmado ayer por el ministro de Justicia de la provincia de Buenos Aires, Ricardo Casal: “El crimen de Tomás fue premeditado, no hay dudas. El que lo hizo, lo hizo así. Alguien lo subió a algún vehículo y terminó en ese montecito de las afueras de Lincoln asesinado de un modo inmediato. Se está trabajando para ver si alguien pudo haber visto algo”, dijo el funcionario.
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